Cómo saber cuál es el mejor producto de limpieza para el rostro

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Aquí estamos de nuevo, espero que tod@s hayáis tenido unos estupendos días libres 😀

Hoy vamos a comenzar otra serie de post esta vez dedicados a ofrecer unas pautas para saber elegir un producto específico. Es decir, el producto específico en los diferentes pasos de los gestos imprescindibles de belleza como son: Limpieza, Reconfortar la piel y el Tratamiento día y noche.

Sobre los Cuidados de la Piel y los Gestos Imprescindibles de Belleza ya he hablado en varias ocasiones. En este blog tenéis varios post sobre el tema tanto para ellas como para ellos y dependiendo de si tu piel es joven, madura o de más de 50 años. Estos posts son de obligada lectura si queréis saber todos los secretos de una piel sana y bonita 🙂

Hoy partiremos de la base de que seguís todos estos consejos y queréis elegir una limpiadora para vuestra rutina diaria. Tengamos clara una cosa hoy voy a hablar sobre limpiadoras para utilizar diariamente no de desmaquilladores, vale? 😉

Así que una vez dicho esto, comencemos:

En el mercado existen cientos de texturas y marcas. Debemos elegir una textura y una formulación adecuadas a nuestro tipo de piel, sus necesidades, nuestro gusto y lo más importante nuestro bolsillo. No hacemos nada nos sacrificamos para comprar ese producto súper caro si luego no podemos permitirnos una continuidad.

La continuidad es la clave.

Para comenzar, debemos saber si nuestra piel es grasa, mixta, sensible o seca a la hora de seleccionar el tratamiento de limpieza. Porque, por ejemplo, si utilizamos para limpiar una piel grasa una limpiadora en textura jabón con una formulación purificante podremos experimentar una sensación agradable al principio debido a su acción astringente, pero después puede que se genere el doble de grasa. Primero nos quitará los brillos pero después tendremos el doble de ellos. 🙁

En cuanto a texturas tendremos en cuenta el tipo de piel y los gustos de cada uno. Por ejemplo, textura en:

Crema: Muy adecuada para pieles secas, sensibles que no toleran el agua. Para pieles maduras de +45 años que necesiten hidratación. Estas texturas son untuosas y muy hidratantes, así que dependerá también de si nos gusta esa sensación en nuestra limpieza diaria 🙂

Aceite: Con características y resultados similares a la textura en crema. Así que adecuada para pieles secas, sensibles que no toleran el agua y pieles +50 años. Al ser aceite está indicado para dar un aporte añadido de hidratación en pieles secas 🙂

Leche: Muy adecuada para pieles normales o mixtas y pieles entre 30 y 40 años. Esta textura es menos untuosa que las anteriores. Todo dependerá de tu gusto 🙂

Mouse o Espuma y Gel: Todos estos productos se utilizan con agua y se retiran con agua. Son ideales para todo tipo de pieles pero sobre todo para pieles grasas, mixtas-grasas y pieles con problemas de acné. Pues la mayoría suelen tener propiedades purificantes y astringentes. Aunque también las puedes encontrar con propiedades hidratantes. Por lo tanto es ideal también para pieles jóvenes y pieles de hasta 30 años o más dependiendo del estado de la piel.

Es decir para pieles como la mía de 46 años que es una piel mixta tirando a seca y no me gustan las texturas untuosas. Me da la sensación de que al utilizar agua me limpie más además de dejarme la cara más fresquita así me espabilo por las mañanas, ajajajaja

Líquidas como el Agua Micellar: Cada vez hay más productos de esta textura líquida. Las aguas micellares realizan una limpieza digamos más “química” (sólo para entendernos porque pueden ser de lo más naturales) por el hecho de que no necesitas quitarlo ni enjuagarlo, sólo pasar un algodón impregnado y listo.

A mí personalmente me encanta utilizarla en invierno ya que no me gusta lavarme la cara con agua caliente o templada y en invierno con agua fría me hielo. Así que con este producto no paso frío y me quedo fresquita 🙂

Las aguas micellares no necesitan tónicos para reconfortar la piel después de la limpieza ya que no agrede a la misma.

Pero el resto de texturas sí necesitan reconfortar la piel con un tónico después de la limpieza aunque hayas utilizado un producto adecuado. El tónico nos aportará una sensación de frescor y confort que reconforta nuestra piel y la deja lista para recibir el tratamiento posterior.

Todos los tónicos serán de la misma textura, o sea, acuosos. Ahora bien puedes elegir sus propiedades como si de una crema se tratara y así completar tu tratamiento. Los puedes encontrar con propiedades: hidratantes (que suavizan), reafirmantes, regenerantes, purificantes (que calman), exfoliantes, etc.. Por ejemplo: podríamos elegir un tónico hidratante por las mañanas y regenerante por las noches 🙂

Sobre cómo aplicar el tónico puedes leer el post publicado al respecto aquí 🙂

Y ahora vamos a echar un vistazo a los productos de limpieza que he utilizado y así a través de mi experiencia y opiniones podéis ir creando las vuestras y así ver si es lo adecuado para vuestra piel.

Uno de los que más me gustan es de Biotherm de la línea Biosource la espuma limpiadora y el tónico de hidratación intensa para pieles normales. He visto que se han descontinuado. En la web sólo está la espuma y no hay stock, una pena.

Esta combinación era perfecta. La espuma era súper agradable, con cuerpo y unos aromas sencillos con sensación a limpio. La utilizábamos maridin y yo y nos encantaba. Además los botes eran bastante grandes y duraban mucho. En cuanto al tónico era un líquido algo más denso que otros, te la podías poner como una loción y no se te resbalaba entre los dedos. Al terminar tenías la cara fresquita y sin sensación de tirantez. Me encantaban estos productos 🙂 Muy aconsejables.

Agua micellar Bella Aurora. He utilizado otra que ni nombraré pues me ha producido un escema. Así que si vais a probar alguna que sea la de Bella Aurora pues es una maravilla. La utilizamos los dos maridin y yo y a él también le encanta. Te deja la piel suave, fresquita, sin sensación de tirantez y encima tiene agentes aclarantes para tener tus manchitas a raya. Como ya he dicho, me gusta usarla de vez en cuando y sobre todo en invierno. Es uno de mis productos favoritos, que no la descataloguen por favor 😉

Tenéis un análisis completito de este producto aquí 🙂

Y esto es lo que llevo utilizando (bueno los dos que maridin también lo utiliza) ya algunos años alternándolo con lo anterior mencionado. El gel limpiador Ultra Facial Cleanser y Cucumber Herbal alcohol-free Toner ambos de Kiehls.

El gel es para todo tipo de pieles. Es un gel denso y con una cantidad pequeña tamaño lenteja tienes para toda la cara. Hace algo de espuma cosa que me gusta para notar que limpia 😉 jejej No deja la piel tirante, da sensación agradable y su aroma es casi inexistente como en todos los productos de esta marca. En cuanto al tónico es muy líquido pero lo sigo utilizando como si de una loción para después de afeitar se tratase, sin algodón. A mí me gusta así. Te deja sensación de frescor y la piel reconfortada. No tiene ningún aroma y eso es algo que me enamora 🙂

Ambos productos son mis favoritos tanto por su calidad como por su precio y duración. Por eso los sigo (o mejor dicho, seguimos maridin y yo) utilizando.

Tenéis un análisis de varios productos Kiehl’,s entre ellos estos dos, aquí.

Hay algunos más que he utilizado durante todos estos años, pero no quiero liaros y estos son de lo mejorcito. Para que vosotros podáis escoger tenéis que pensar si vuestros productos os aportan estas características y si se adaptan a vuestro bolsillo pues tendréis que comprarlos de nuevo al acabarse. Ya sabéis mi premisa: “sólo se cambia de producto si vuestra piel cambia”. Eso de que la piel se acostumbra es una leyenda urbana, creerme 🙂

Como último consejo os diré que si nos aplicamos en limpiar nuestro rostro diariamente, añadimos exfoliaciones periódicas e hidratamos adecuadamente todos los días además de añadir un buen protector solar nuestra piel se verá estupenda. Si a todo esto le añadimos una limpieza específica en un centro de belleza de forma regular como por ejemplo cada 8 semanas nuestra piel pasará a estar maravillosa.

Pero si cada 8 semanas es mucho para vosotr@s, intentad por lo menos hacerlo dos veces al año:

Una al final del Verano: para limpiar la obstrucción de los poros durante esta época que a lo ya expuesto se añade el sudor.

Y otra al final de Invierno: pues durante esta época la pieles secas se convierten en muy secas y las grasas en muy grasas. Con este gesto ayudas a eliminar el exceso de impurezas generadas.

Y así tendréis una piel maravillosa 🙂