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Pues no, lo siento, no voy a hablar de las camisetas con mensaje aunque se hayan puesto tan de moda últimamente 😀
Hoy voy a hablar de los mensajes que sin darnos cuenta se pueden colar en nuestra ropa y por lo tanto son mensajes que transmitimos aunque no queramos.
Y os preguntaréis: ¿cuáles son esos mensajes en la ropa? Aquí tenéis algunos ejemplos:
Los detalles más comunes y a los que prestamos poca atención serían: Una prenda deshilachada, arrugada, deformada, descolorida, una mancha que no se va, la falta de un botón visible, etc.
O con el calzado que tenga las puntas desgastadas, llevar los zapatos sin limpiar, etc.. Olvidarse del estado de tus zapatos suele ser un despiste muy habitual 🙂
En una chaqueta de traje, me da igual que sea de chico o chica, unas mangas demasiado largas, el cuello de la chaqueta demasiado amplio y/o la chaqueta demasiado estrecha.
En las camisas clásicas si los cuellos son demasiado amplios y/o la camisa es demasiado corta y se sale del pantalón o falda.
Y si dejamos la ropa y vamos a nuestra imagen debemos tener cuidado con el peinado, una raya de tinte sin retocar, una melena sin pulir, unos rizos deshechos sin ser adrede, una coleta deshecha por descuido, etc. Maquillarse o no es opcional pero tener una buena cara hará mucho por ti da igual cómo la consigas 😉
Todos estos detalles cuelan mensajes en tu ropa y pueden jugar en tu contra en momentos puntuales. Dependiendo de en qué situación los lleves darán un mensaje u otro.
En tu vida cotidiana dónde todos te conocen y saben quién eres uno suele relajar su imagen. Si estás de ocio disfrutando de un día libre este tipo de mensajes tienen la importancia que tú quieras darle.
Pero si se te “cuela uno de esos mensajes” en tu vida profesional puede llegar a ser otra historia 🙂
Por ejemplo, si se te cuela uno de esos mensajes para ir a trabajar puede dar la sensación de que estás hasta arriba de trabajo. Ya sea en tu empresa o en casa. Que no tienes tiempo ni para ti, que necesitas un descanso o que pides ayuda a gritos. En este caso gritos silenciosos 😀
Si “se te cuela uno de esos mensajes” cuando asistes a un evento: estás diciendo que el evento no te importa demasiado, que te han obligado a asistir, que vas pero te irás pronto pues no te interesa mucho, etc.Si eres el organizador de un evento o una persona con cierto nivel en ese evento, departamento, empresa, etc.. es decir, que estas protagonizando un hito importante en tu carrera profesional. Uno de esos momentos en los que tienes que dar imagen de profesional, de alguien que sabe lo que hace y que lo hace bien.
En estos casos si “se te cuela uno de esos mensajes”, en realidad, estás dando la impresión de que no te importa en lo más mínimo lo que haces. Tu imagen de profesional se desvanece y no ofreces el respeto que los demás (a tu cargo) se merecen.
Sí, puede que hayas tenido una gran excusa para que se haya “colado ese mensaje en tu ropa” pero ya no hay vuelta a atrás. Y sí, reconozco que estas precepciones pueden ser un poco duras pero debes tenerlo en cuenta.
Una buena forma de evitarlo es programar. Programar nuestro vestuario para esa ocasión en la que hay que darlo todo. Programar con la antelación necesaria para poder plancharte la camisa, coser ese botón o quitar esa mancha que no viste 🙂
Y a la hora de comprarte la ropa hazlo también con tiempo y pensando para qué la vas a utilizar. Llevar la talla adecuada siempre dará un plus a tu imagen. ¡Recuérdalo! Y esmérate en conseguirlo. Hoy en día es fácil ya que tenemos la suerte de tener a nuestra disposición infinidad de marcas con un baremo de precios muy amplio por lo que siempre habrá alguna prenda que se adapte a nuestras necesidades y nuestro bolsillo.
Como podéis ver esto va más allá de llevar una prenda de moda o no. Controlar los mensajes que se cuelan en tu ropa es una cuestión de respeto, respeto por uno mismo, por su trabajo y hacia los demás.
Así que por favor no añadas mensajes innecesarios a tu ropa.
Ahora una aclaración: Sí, la mayoría son ejemplos de trajes chaqueta de chico pero son válidos para nosotras también. Y no sólo para trajes de chaqueta. Lo que ocurre es que al elegir prendas clásicas para los ejemplos me ha facilitado la forma de conseguir que sepáis a qué me refiero. Pues una largura de manga adecuada es igual para ellos que para nosotras, en una camisa o en un vestido, da lo mismo. O si una prenda no se adapta a la silueta le quedará mal tanto a ellos como a nosotras 😉 Así que ¡nada de excusas!
Los dibujitos son de la página web Real Men Real Style, las fotos de las celébrities son de dailymail.co.uk y revistagq.com. Las otras fotos son de Pixabay y de mi página de Pinterest